Vender un coche de empresa es tarea fácil siempre que se cuenten con los conocimientos necesarios o el asesoramiento correcto.
El realizar una transferencia de un vehículo a nombre de una empresa es un poco diferente que realizarlo entre particulares, es decir, no hay contrato de compraventa entre comprador y vendedor, además de sustituir el contrato por una factura con o sin parte de IVA en función de que el vehiculo esté afecto a la actividad o no.
Y por otro lado el ITP (Impuesto de Transmisiones Patrimoniales) no se paga al realizarse una factura con IVA.
A la hora de vender un coche de empresa, a la documentación normal de identificación del vehículo y de las partes (Comprador y Vendedor) hay que añadirle la necesidad de identificar al administrador o representante de la Empresa junto con la copia del CIF.
Asimismo y como en cualquier transferencia de vehículos, ya sea entre particulares o al vender un coche de empresa, te recomendamos que previamente a realizar la compra del coche solicites un informe de vehículo para poder ver si el coche tiene algún tipo de carga, limitación de disposición o embargo.
Además de poder comprobar a nombre de quien figura el vehículo y de otros muchos datos como el número de propietarios, el color del coche, centímetros cúbicos, estado de la ITV (Inspección Técnica de Vehículos) y muchos otros datos más.
En el caso de tener un embargo el vehículo, con el informe del registro de bienes muebles se obtiene más información acerca de las deudas, detallándose la procedencia, la fecha de embargo y el importe de la deuda.
Si necesita vender un coche de empresa, acérquese a cualquier Gestoría Administrativa y nosotros le ayudaremos a realizar su gestión para cambiar de titularidad su vehículo con las mayores garantías.